La falta de sueldos competitivos puede afectar la atracción y retención de talento valioso para una empresa... o para el sector público.
CIUDAD DE MÉXICO (Expansión). - El plan de austeridad del gobierno federal, que incluye la bajada de sueldos de los altos mandos, lleva días ocupando titulares. Tanto, que incluso Ángel Gurría, secretario general de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), se pronunció sobre el tema durante su visita esta semana a México, en la que señaló que la austeridad de la nueva administración no debe ir contra la profesionalización e integridad del desempeño de los funcionarios.
La situación que plantea la decisión del gobierno sobre los salarios no solo afecta al sector público, es un tema recurrente también en el privado. ¿Cómo se determina cuál es un buen salario? La pregunta no siempre es fácil de resolver, pero los especialistas consultados señalan que responderla de forma correcta puede significar la diferencia entre el crecimiento o el estancamiento de un negocio. O en el caso de una administración, su buen funcionamiento.
Leopoldo Lemus, director de la consultoría Sistemas Humanos (SH), asegura que un un salario tiene dos funciones primordiales: la atracción de personal y su retención. “Si no ofreces un buen salario, tendrás solo los talentos que puedas y no los que realmente requieres”, apunta.
Los especialistas consultados aseguran que al no haber salarios competitivos, la retención de los colaboradores valiosos no será efectiva y los daños en la productividad dentro de las organizaciones pueden darse principalmente por dos razones.
1.- A menos motivación, menor desempeño.
“Si los colaboradores no tienen un incentivo que los impulse a realizar sus actividades, únicamente tendrán un cumplimiento mínimo indispensable”, asegura Alejandro Fuentes Bagaría, director comercial de Ingeniería para Transformación de Negocios (ITN), consultora dedicada al desarrollo organizacional.
2.- La gente le dedica menos tiempo a sus actividades laborales diarias.
“Con un salario bajo, ahora las personas tendrán que complementar sus actividades con otras que le generen ingresos y les permitan mantener su nivel de vida”, menciona Rosamaría Becerra Lázaro, cofundadora de Brilio, empresa dedicada a la consultoría de Recursos Humanos.
Por otra parte, Becerra asegura que para implementar políticas de austeridad previstas, hace falta planeación y estrategia. Afirma que es necesario realizar una evaluación salarial a nivel nacional y global para entender la lógica de los salarios y ofrecer un plan más competitivo.
Asimismo, Fuentes apunta que, en vez de disminuir los salarios, debería existir una inquietud por saber cómo se puede generar más valor desde las funciones de las instituciones públicas y privadas, fijado metas y teniendo claros los indicadores y rutas que facilitan su cumplimiento. Así se generará un mayor retorno de inversión y se cubrirán los gastos salariales de manera adecuada.